¿Por qué el nuevo torneo atenta contra los principios deportivos así como económicos y políticos del futbol? Los posicionamientos oficiales de la UEFA y la FIFA, órganos reguladores del balompié a nivel continental y mundial, respectivamente, no dejan lugar a la duda ni a la neutralidad.
Redacción FyL
En las últimas horas del pasado domingo 17 de abril, se anunció oficialmente la puesta en marcha de un nuevo torneo de clubes europeos llamado Superliga Europea, conformada por 15 clubes fundadores (fijos), que se autodenominan «los más importantes clubes europeos», y que son de solamente tres países: España, Inglaterra e Italia.
Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, fue designado por los clubes de la Superliga como primer presidente de la misma, y fue él quien emitió los primeros comunicados oficiales, en los que justifica la creación de este torneo, señalando que la pandemia «aceleró la inestabilidad en el modelo económico del fútbol europeo existente» y que las conversaciones con las partes interesadas del fútbol no han resuelto «problemas fundamentales» con el formato de las competiciones europeas.
«Al reunir a los mejores clubes y jugadores del mundo para que jueguen entre sí durante toda la temporada, la Superliga abrirá un nuevo capítulo para el fútbol europeo, asegurando una competencia e instalaciones de clase mundial y un mayor apoyo financiero para la pirámide del fútbol en general», dijo Joel Glazer, copresidente del Manchester United y vicepresidente de la Superliga.
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‘Cínico proyecto’: UEFA
El domingo 18 de abril, la Unión Europea de Futbol Asociación (UEFA) emitió su posicionamiento oficial, del cual destaca el siguiente párrafo:
…nosotros —la UEFA, la FA inglesa, la RFEF, la FIGC, la Premier League, LaLiga, la Lega Serie A, pero también la FIFA y todas nuestras federaciones miembro— permaneceremos unidos en nuestros esfuerzos para detener este cínico proyecto, un modelo que se basa en el interés propio de unos pocos clubes en un momento en que la sociedad necesita más que nunca la solidaridad.
La UEFA expresó que la medida a tomar será vetar a los clubes y a los jugadores que participen en la Superliga de todos los torneos sancionados por el órgano continental, por lo que el conflicto que se cierne es mayúsculo.
Incluso a título más individual, Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, se pronunció totalmente en contra de la creación de la Superliga diciendo:
Esto tiene que ver con la avaricia, egoísmo y narcisismo de algunos… Vamos a sacarlos de todas las competiciones y prohibir a los jugadores participar en nuestras competiciones.
‘Una liga separatista’: FIFA
La Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) el sumo órgano regulador del futbol a nivel mundial, también dio a conocer su posicionamiento en un comunicado oficial en el que destaca que «de acuerdo con nuestros estatutos, cualquier competición de fútbol, ya sea nacional, regional o mundial, siempre debe reflejar los principios básicos de solidaridad, inclusión, integridad y redistribución financiera equitativa.»
En este contexto, la FIFA solo puede expresar su desaprobación a una «liga separatista europea cerrada» fuera de las estructuras futbolísticas internacionales y sin respetar los principios antes mencionados.
Ligas y clubes rechazan la Superliga
Varios clubes, federaciones y directivas de torneos, han manifestado su desacuerdo con la Superliga. Por ejemplo, Hans-Joachim Watzke, presidente del Borussia Dortmund, cuyo nombre llegó a ser mencionado como un posible miembro de la Superliga, comunicó el resultado de una reunión extraordinaria llevada a cabo el domingo por la noche con los representantes de los clubes ante la ECA (Asociación de Clubes Europeos, un órgano reconocido por la UEFA), en el que la «posición clara de los miembros de la junta directiva de la ECA fue que los planes para fundar una Superliga fueron rechazados».
La esfera política
La creación de la Superliga ha trascendido su esfera estrictamente deportiva y como industria del deporte-espectáculo. El primer ministro británico, Boris Johnson, manifestó que el proyecto «no es una buena noticia para los aficionados y tampoco para el fútbol en este país», y se comprometió este lunes a «hacer todo lo que pueda» para evitar que el proyecto de la Superliga europea «salga adelante del modo en que está planeado».
Han puesto ‘en jaque’ al futbol mundial: Fáitelson
El conflicto que se avecina con la creación de la Superliga y las posturas de los clubes, la UEFA y la FIFA no es una asunto simple. En caso de mantenerse inflexibles ambos lados, ponen en riesgo muchos de sus intereses e incluso la viabilidad de sus propios proyectos.
La codicia es tan fuerte que prevalece por encima de todos los valores humanos.
Aleksander Ceferin
En su cuenta de Twitter, el comentarista deportivo David Fáitelson expone el problema de un modo sucinto no carente de tendencia:
¿Entiendo bien? Si la UEFA cumple sus amenazas, ¿el Mundial se jugaría sin Messi, sin Cr7, sin Ibrahimovic, sin Lukaku entre otras muchas estrellas del futbol? Con todo respeto, la UEFA y la FIFA están «en jaque». Han perdido a la «Reina» y el «Rey» está rodeado…
La realidad: ni la UEFA ni la propia FIFA pueden sin el Real Madrid, sin el Barcelona, sin la Juventus y sin el Manchester United… Los grandes clubes de Europa han puesto “en jaque” al futbol mundial… Los euros «hablan»: Se calcula que los 20 clubes que conformarían, a la larga, esta Superliga, ganarían, como mínimo, unos 60 millones por participar. El ganador recibiría algo más de 20 millones de euros, más del doble de lo que recauda el ganador de la actual Champions League.
¿Qué esperar?
Es evidente la necesidad y la urgencia de una solución diplomática y que, de darse, aún en los mejores términos, la UEFA y a FIFA se exponen a mayores pérdidas, no sólo económicas, sino en cuanto a su credibilidad institucional, de modo que la élite liderada por Florentino Pérez tiene muchas más posibilidades de llevar a cabo su proyecto con la menor proporción de concesiones o modificaciones.
Lo cierto es que cualquier cosa que ocurra en los siguientes días escribirá una página ignominiosa en la historia del futbol mundial.
